Los Dallas Cowboys retomarán la acción este lunes por la noche cuando enfrenten a los New York Giants después de haber tenido su jornada de descanso en la semana 8. Es un momento importante para los Cowboys que cuentan con cuatro victorias y tres derrotas en lo que ha sido una campaña inconsistente. Las expectativas eran altas para este equipo pero tres derrotas consecutivas los pusieron en una posición incómoda desde temprano. Afortunadamente, su récord ha sido lo suficientemente bueno para mantenerlos en el primer lugar de la NFC East, lo que significa que la temporada está en control de Dallas.
A pesar de lo difícil que fue perder tres semanas al hilo, este equipo está en una mejor posición de lo que muchos pensarían. Una victoria ante los Philadelphia Eagles los puso en control de su división y el partido que realmente podría definir el futuro de ambos rivales es su segundo encuentro que tomará lugar en Philadelphia en la semana 16 de la temporada.
Noviembre será clave para este equipo, pues vienen unos duelos bastante complicados:
- @ New York Giants (2-6)
- VS Minnesota Vikings (6-2)
- @ Detroit Lions (3-3-1)
- New England Patriots (8-0)
- Buffalo Bills (5-2)
El equipo entrará a este mes con un poco de vuelo después de haber aplastado a Eagles 37-10 en un partido en el que todo salió bien en el AT&T Stadium. La defensiva robó el balón y la ofensiva supo capitalizar. Ezekiel Elliott se vio como se veía en su temporada de novato en 2016 y Amari Cooper acumuló más de 100 yardas a pesar de haber estado lidiando con una lesión. DeMarcus Lawrence despejó las dudas que muchos tenían de él a pesar de estar jugando a un alto nivel. Incluso Leighton Vander Esch, quien se lesionó, jugó su mejor partido de la temporada ante Eagles.
Los Cowboys sin duda sacarán ventaja de la semana de descanso que les permitió descansar con tanto jugador lesionado. Byron Jones, Amari Cooper, Tyron Smith y La’el Collins ya estaban de vuelta, pero estaban tocados. Robert Quinn y Vander Esch sufrieron lesiones en el último partido pero tuvieron tiempo para sanar.
Y ahora tomarán el campo ante una débil defensiva de Giants y un QB Daniel Jones que ha entregado mucho el balón después de su debut ante los Tampa Bay Bucs. Tienen la oportunidad perfecta para continuar creando “momentum” rumbo a los duelos pesados que los esperan.
El trade de Michael Bennett
Los Cowboys obtuvieron a un muy buen jugador defensivo antes de la fecha límite de trades en Michael Bennett, quien ha estado en múltiples equipos los últimos años. Ha formado parte de los Seattle Seahawks, Philadelphia Eagles y New England Patriots. En todos ha sido un buen jugador, pero los problemas de actitud han manchado un poco su carrera.
Los Cowboys tuvieron que pagar muy poco por Bennett, ya que Patriots buscaba deshacerse de él pronto. Una séptima ronda del 2021 fue todo lo que el defensivo costó, lo cual hace de este trade uno con casi nada de riesgo para el equipo.
Por otro lado, el equipo se lleva una pieza para su línea defensiva que podría hacer una gran diferencia. Bennett es muy, muy bueno y puede jugar como ala defensiva o en el interior como tackle. Me encantaría ver que los Cowboys lo dejaran jugar en el interior, ya que ha sido el punto más débil para Dallas esta temporada.
La emoción de Jamal Adams
Por un momento, pareció que los Cowboys obtendrían a uno de los mejores safeties en la NFL, Jamal Adams. El martes pasado, horas antes del cierre de trades, muchos reportes salieron a luz de que Dallas estaba en negociaciones con los New York Jets por su joven safety Jamal Adams. La emoción fue creciendo conforme la hora límite se acercaba, dado que había muchos reporteros indicando que un trade estaba cerca de ocurrir.
Al final, no hubo intercambio. A pesar de que muchos han criticado a la administración por ser conservadora, es justo recordar que los Jets podrían haber pedido de más. De hecho, algunos han reportado que querían más de dos selecciones de primera ronda. Probablemente, Jets no quería deshacerse de Adams, pero quiso ver quien ofrecía cuanto.
