Por muchos años, el tema del tope salarial ha sido un tema sensible para los Dallas Cowboys. Entre dinero muerto y otros problemas, el equipo ha tenido una situación delicada en este aspecto. Sin embargo, para la temporada del 2019 tienen más espacio de lo que estamos acostumbrados.
Según Over The Cap, los Cowboys tendrán aproximadamente 48 millones de dólares disponibles en 2019. Es importante recalcar que este número no es definitivo y puede cambiar. Año tras año, esta administración ha sido aficionada de reestructurar los contratos de ciertos veteranos para liberar espacio salarial constantemente. Además de esto, hay varios jugadores bajo contrato que el equipo podría decidir cortar para liberar aún más dinero.
Al ver sólo 48 millones disponibles, es complicado imaginar un escenario en que el equipo logre satisfacer todos sus objetivos. Hay bastantes candidatos a grandes extensiones en el equipo, principalmente dos jugadores. En una liga en la que quarterback es la posición más importante, la segunda más importante podría ser la del caza cabezas, cuyo objetivo es ir tras el quarterback contrario.
Pues en Dallas, hoy dos jugadores en estas posiciones que hay que extender. El más urgente sin duda es el defensive end DeMarcus Lawrence. Lawrence se puso el jersey del equipo cuando este lo designó a jugar bajo la etiqueta franquicia. Afortunadamente, el atleta de 26 años la hizo de soldado y jugó sin amenazar con faltar a entrenamientos ni pretemporada.
Lo que sí comentó es que no pasaría por lo mismo en 2019. Ahora, el momento está aquí y es tiempo de que los Cowboys lo extiendan. El valor de Lawrence es difícil de predecir, pero es bastante seguro que se acercará a los números de Khalil Mack. Mack hizo historia ganando un contrato que en promedio gana 23.5 millones al año. Si bien no anticiparía que lo supere, la cifra estará cerca al contrato del defensivo de los Chicago Bears.
Además está Dak Prescott, cuyo contrato probablemente estará por encima de los 25 millones anuales. Son contratos caros, pero son piezas fundamentales para el equipo. Definitivamente se les tiene que pagar a ambos. Son pilares que año tras año buscan equipos en toda la NFL.
Además de esto, Amari Cooper, Ezekiel Elliott, Cole Beasley y más podrían tener un impacto en el tope salarial. Algunos buscan un contrato nuevo, otros una extensión. Pero honestamente, me parece que habrá más espacio en el tope salarial de lo que pensamos. Sólo es cuestión de tiempo para que los Cowboys comiencen a reestructurar a sus veteranos para ahorrarse unos cuantos millones para utilizar en agencia libre.
Tyron Smith, Tyrone Crawford entre otros pueden ser buenas opciones para comenzar este proceso. Antes era Jason Witten uno de los candidatos favoritos para este proceso, pero él ya se encuentra comentando partidos para ESPN. En Inside The Star, continuaremos actualizándote con contenido al día de los Dallas Cowboys.