Mientras los Dallas Cowboys y el Quarterback Dak Prescott siguen en negociaciones para llegar a un acuerdo a largo plazo, muchos se preguntan quien tiene la “palanca” en dichas negociaciones. La NFL es una industria con una economía un tanto complicada y a veces es difícil considerar todos los elementos que forman parte de las negociaciones entre las franquicias y sus jugadores. Sobre todo cuando se trata de los quarterbacks, quienes suelen formar la elite de los más pagados en la liga.
La verdad, es que la respuesta es muy clara. Actualmente, quien tiene la “palanca” en las negociaciones es Dak Prescott y su agente Todd France. ¿Por qué? Esta semana en Cowboys en Español, lo averiguamos.
Para empezar, ¿en qué situación están actualmente? Con tantos reportes en redes sociales (algunos falsos, algunos ciertos), es fácil perder de vista cuales son las actuales opciones para Prescott y las ofertas que los Cowboys le han hecho formalmente.
¿Qué hay en la mesa?
Siendo que el contrato de novato de Dak Prescott llegó a su fin antes de que el equipo lo extendiera, el quarterback de los Cowboys no está firmado en este momento. Sin embargo, está designado como un jugador etiqueta franquicia.*
Básicamente, una etiqueta franquicia es un trato de un año que obliga al jugador a quedarse en su equipo. Un equipo de la NFL sólo puede usar la etiqueta franquicia una vez al año. Dicha etiqueta le paga al jugador el promedio de los jugadores mejores pagados en su posición.
De jugar bajo la etiqueta franquicia, Prescott ganaría 31 millones totalmente garantizados en la temporada del 2020.
Sin embargo, Dak no ha firmado la etiqueta, puesto que sigue en negociaciones por un contrato a largo plazo. Según diversos reportes, los Cowboys le hicieron una oferta a Prescott por cinco años con un salario promedio anual de 35 millones de dólares y más de 100 millones garantizados.
En resumen, las opciones que Prescott tiene actualmente son:
- Firmar la etiqueta franquicia por 31 millones de dólares garantizados en 2020.
- Una extensión de contrato de cinco años por un valor promedio de 35 millones de dólares por año y 100 millones en garantías.
Dak Prescott y los Dallas Cowboys pueden seguir negociando hasta el 15 de julio, la fecha límite que tienen los jugadores etiquetados para llegar a una extensión a largo plazo. Si para entonces no han llegado a un acuerdo, Prescott tendría que jugar forzosamente bajo la etiqueta franquicia.
Antes de que podamos adentrarnos a otros detalles de las negociaciones, desmintamos algunos cuantos mitos.
Mitos principales sobre la situación contractual de Dak
Mito #1: El quarterback mejor pagado es el mejor quarterback
Es un pensamiento completamente entendible. “No merece que le paguen como el mejor porque no es el mejor.” Sin embargo, no es así como funciona el mercado de la NFL. Así como para un producto el valor es lo que el cliente esté dispuesto a pagar, el valor de un jugador es el que un equipo esté dispuesto a pagarle si el jugador es un agente libre.
En otras palabras, Prescott no está obligado a firmar por un contrato con los Cowboys. Si el mercado está dispuesto a pagarle más de 35 millones de dólares, ¿por qué aceptaría menos en Dallas?
El tope salarial, además, tiende a crecer todos los años por muchos motivos. Cada temporada, los equipos de la NFL pueden gastar más. Entre y eso y la inflación, queda claro porque la marca de “el mejor pagado” es rota constantemente.
Mito #2: Pagarle a un QB evita que el equipo arme un equipo
Lógicamente, pagarle a un quarterback un contrato que lo posicione como uno de los mejores pagados hace que el equipo pueda pagar menos a otros jugadores. Sin embargo, el argumento de que no se puede competir por un Super Bowl si le pagas a tu mariscal de campo no tiene fundamento.
Bob Sturm, escritor en The Athletic, hace un buen trabajo desmintiendo esta idea al demostrar que los equipos están constantemente contendiendo por un Super Bowl a pesar de tener un mariscal de campo entre los mejores pagados.
Mito #3: Andy Dalton presionará a Prescott a firmar una extensión
Ni siquiera Andy Dalton cree eso. Una excelente contratación por parte de los Cowboys, sin duda. Pero no genera palanca alguna a favor de la directiva por muchas razones. Primero que nada, sabemos que el equipo está comprometido a quedarse a Dak en el largo plazo. Lo han dicho una y otra vez.
Además, la evidencia demuestra que Prescott es superior a Dalton el día de hoy. Claro, Dalton probablemente pueda ser titular en la NFL y tuvo éxito con los Bengals al inicio de su carrera. Pero no es mejor que Dak, además de ser seis años mayor que él.
Pero la verdadera razón es que…
Dak Prescott y compañía tienen palanca
Regresemos a la extensión de contrato propuesta por la directiva. Cinco años, 35 millones de dólares anuales en promedio con más de 100 millones en garantías. El problema de esta propuesta para Dak no está en la cifra de dinero, sino en el plazo del contrato.
Mientras que los Cowboys ofrecen cinco años, los agentes de Prescott se esfuerzan por firmar solo por cuatro. ¿Por qué? Muchas razones.
Alrededor de la NFL, los quarterbacks han estado buscando contratos de menos tiempo para poder “volver a cobrar” otro contrato más pronto en sus carreras. Pero la verdadera razón es que los ingresos de la liga están a punto de cambiar drásticamente.
El tope salarial de la NFL es definido por los ingresos de la liga. Cada año, el 48% de los ingresos de la NFL (según el nuevo Acuerdo Colevtivo de Trabajo o CBA) es dirigido a los jugadores. Si los ingresos de la liga suben, sube el tope. Por ello el incremento anual del tope.
Habiendo dicho eso, los contratos con las televisoras están a punto de expirar y se negociarán nuevos, lo cual significa mayores ingresos para los equipos y un tope salarial que puede hacer parecer el contrato de Prescott como una ganga en unos años.
De los últimos siete quarterbacks en firmar por más de 30 millones anuales, solo Matt Ryan ha firmado por más de cuatro años nuevos. Los demás han aspirado a contratos más cortos.
¿Y qué puede hacer Prescott si no llega a un acuerdo a largo plazo? Sencillo, firmar la etiqueta franquicia por 31 millones garantizados y volver a las negociaciones en 2021.
Si el equipo desea asignarle la etiqueta franquicia de nuevo entonces, les costaría 20% más que la de esta temporada, ósea más de 37 millones.
¿Y si lo quieren hacer por tres años seguidos? Tendrían que pagarle 40% más que en su segunda etiqueta… es decir, 54 millones de dólares garantizados en 2022. Siendo que esto no es una posibilidad real, Prescott tendría un camino a la agencia libre, donde su valor se podría catapultar.
Todo esto sin mencionar que estamos a una nada de llegar a la era de los quarterbacks de 40 millones. Actualmente, el mejor pagado en promedio por año es Russell Wilson con los Seattle Seahawks que gana 35 anuales.
Patrick Mahomes con los Kansas City Chiefs podría romper la barrera de los 40 muy pronto con un Super Bowl y un MVP en su currículum.
Prescott puede esperar y apostar en sí mismo como lo hizo en 2019 y cobrar finalmente.
¿Y qué pueden hacer los Dallas Cowboys? Cuando no tienes palanca, se trata de mantener tu posición. Para Jerry Jones y compañía probablemente se tratará de esperar hasta el 14 de julio (un día antes de la fecha límite para extenderlo) y hacer una última oferta. Ver si Dak de verdad quiere arriesgarse a una lesión en 2020 sin seguridad a largo plazo.
A estos elementos hay que agregarle la contingencia del COVID-19. ¿Qué ingresos tendrá la liga en 2020 si no hay aficionados? ¿El tope salarial bajará? ¿Qué pasará en la agencia libre 2021? Todas esas incertidumbres tendrán un impacto que es difícil de predecir.
Mientras tanto, la fecha importante continua siendo el 15 de julio. ¿Quién va a ceder?